LA MOTIVACIÓN INTRÍNSECA
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Hay miles de maneras de definir lo que es la motivación.
“La motivacion es una fuerza indiscutible que nos empuja a seguir y a definir nuestra conducta. “
“El motivo por el que hacemos las cosas y aquello que impulsa nuestro comportamiento”
“Es esa chispa que permite encenderlo e incentiva el desarrollo del proceso.”
“La motivacion es una fuerza indiscutible que nos empuja a seguir y a definir nuestra conducta. “
Y aunque no todos nos pongamos de acuerdo en la definición, en lo que sí que coincidimos es que la motivación es fundamental para llevar a cabo cualquier acción (desde hacer un proyecto artístico hasta levantarse de la cama en algunas ocasiones).
Precisamente porque es tan importante se ha hablado y estudiado mucho sobre el tema de la motivación, de dónde viene y cómo cultivarla.
Lo primero que tenemos que saber es que hay dos tipos diferenciados de motivación: la intrínseca y la extrínseca.
- La motivación intrínseca es un comportamiento impulsado por un deseo interno, que nace de la propia persona y no del exterior.
- La motivación extrínseca nace de factores externos a la persona.
Las investigaciones comparando a personas movidas por motivación intrínseca y aquellas que son “controladas” por motivaciones extrínsecas, revelan que normalmente aquellos movidos por la primera muestran más interes, excitación y confianza lo que finalmente se traduce en una mejora de la vitalidad, el autoestima y el bienestar general.
Cultivando la motivación intrínseca
En principio una persona “sana” es una persona motivada y con energía y ganas de hacer cosas. Pero es innegable que hay muchas personas que no se sienten así en su día a día.
Y es que (más allá de posibles explicaciones biológicas) existen factores externos que tienen efecto sobre la motivación intrínseca de las personas.
Los contextos sociales catalizan diferencias en la motivación dentro y entre las personas. De la misma manera influencian en el crecimiento personal, resultando en personas que están más auto-motivadas, energetizadas, e integradas en algunos contextos que en otros.
Para hablar de esto nos vamos a referir a la teoría de la Autodeterminación, que estudia la motivación de las personas en relación a necesidades psicológicas básicas.
Necesidades psicológicas básicas:
- la necesidad de ser competente: sentirse capaz de realizar una actividad o tarea
- la necesidad de relacionarse: hay una mayor tendencia al florecimiento de la motivación intrínseca en contextos caracterizados por una sensación de seguridad y de estar relacionado.
- la necesidad de autonomía: sentirse poseedor del control de las propias acciones, la necesidad de ser el protagonista de los hechos que le afectan.
Factores que alimentan la motivación intrínseca
- Curiosidad: La motivación de una persona se despierta cuando algo le llama la atención. Este sentimiento de curiosidad impulsa a explorar y aprender.
- Desafío: Ya sea que tengas un objetivo específico o un nivel de desempeño en mente, los desafíos te mantienen comprometido en el trabajo, te animan a desempeñarte al máximo y te motivan a seguir adelante.
- Reconocimiento: Reconocer tu propio trabajo puede hacerte sentir importante y te permite aspirar logros nuevos.
- Sentido de pertenencia: La cooperación con los miembros del equipo ayuda a crear un sentido de comunidad.
Situaciones en las que puede ser útil utilizar motivación extrínseca:
- Para motivar a una persona a aprender algo nuevo.
- Para iniciar una rutina
- Para hacer que alguien se interese más en una actividad que no le resultaba interesante inicialmente.
- Ofrecer retroalimentación a las personas para que sepan que sus acciones merecen reconocimiento.
De cualquier manera no podemos olvidar dos cosas claves:
- que en la mayoría de los casos, el refuerzo de la motivación extrínseca solo produce un aumento de productividad a corto plazo
- la motivación extrínseca puede convertirse en intrínseca si se consigue que los motivos se internalicen o integren al sentido del yo.
